La inteligencia artificial (IA) dejó de ser una promesa futurista para convertirse en un recurso estratégico que hoy transforma cómo trabajamos, cómo decidimos y cómo nos relacionamos con los clientes. En los últimos años, las empresas de todos los tamaños han encontrado en la IA un aliado para automatizar procesos, escalar operaciones y personalizar experiencias, pero también se enfrentan a dilemas reales: desde la resistencia cultural hasta los riesgos de depender demasiado de lo tecnológico. En este artículo te comparto una visión completa de...